Cómo combatir la sequedad ocular y qué papel tiene el ácido hialurónico.

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El ritmo frenético del día a día, la falta de descanso o la mala alimentación son algunos de los motivos que perjudican la salud ocular.

A nuestros nuevos hábitos de vida se suman el uso excesivo de dispositivos electrónicos y de mascarillas,  agravando esta situación.

Se prevé que casi la mitad de la población mundial sufrirá algún tipo de deficiencia visual en 2050 y la pérdida de visión aumentará a 1.700 millones de personas. Por ello, es importante concienciar a la población de la importancia que tiene prestar atención a nuestros ojos.

Sequedad ocular

Como sabes, el Síndrome de Ojo Seco (SOS) es una enfermedad multifactorial  que afecta a la superficie ocular y que produce molestias, problemas visuales y, en ocasiones, lesiones en la córnea y la conjuntiva. Se calcula que en torno al 60% de la población mayor de 45 años sufre este trastorno. Una patología ocular que hasta ahora afectaba principalmente a mujeres incrementándose con la edad, hasta en un 80% en mayores de 60 años. No obstante, con los nuevos hábitos de vida, esta patología también empieza a afectar significativamente a la población más joven.

¿Por qué se produce?

Esta irregularidad se produce por una cantidad insuficiente de lágrima, por su mala calidad o su rápida evaporación. Las glándulas de Meibomio, localizadas en las placas tarsales de los párpados, se alteran reduciendo la lubricación de la superficie ocular generada por los lípidos que segregan.

Las molestias generadas, son capaces de afectar de manera considerable a la calidad de vida de los pacientes que lo padecen.

Una buena visión mejora la salud y el bienestar a cualquier edad.

 

El papel mágico del ácido hialurónico y sus propiedades

Últimamente oímos hablar mucho del ácido hialurónico y de su uso en medicina estética y en cosmética, pero uno de los usos más comunes del ácido hialurónico es para la lubricación del ojo. Comúnmente se utilizan productos con este ingrediente para aliviar los síntomas de la sequedad ocular. ¿El motivo? Su gran poder hidratante y su viscoelasticidad lo convierten en un activo mágico para el cuidado y mantenimiento de una buena salud ocular.

El ácido hialurónico se encuentra de forma natural en tejidos y órganos del cuerpo humano como la epidermis, el tejido conectivo, los cartílagos, el líquido sinovial, los ojos…

Entre sus propiedades destaca la capacidad para atraer y retener el agua, lo que hace que esos tejidos se mantengan en buenas condiciones. Sin embargo, con el envejecimiento su presencia en el organismo disminuye progresivamente y, como consecuencia, los tejidos pierden hidratación.

¿Cuáles son los principales factores de riesgo del ojo seco?

  • Uso excesivo de lentes de contacto.
  • Consumo de fármacos como antidepresivos, antihistamínicos o anticonceptivos, entre otros.
  • Una cirugía ocular previa.
  • Ciertos factores ambientales como el aire acondicionado, los sistemas de calefacción o la elevada contaminación.
  • Uso excesivo de dispositivos electrónicos.
  • Enfermedades como la diabetes, el lupus, la artritis reumatoide o el síndrome de Sjögren.
  • El uso de mascarilla actúa como una chimenea, deshidratando nuestros ojos.
  • Cambios hormonales.

 

Existen multitud de formas para cuidar uno de tus sentidos más importantes. Además de prestar atención a tu salud visual con revisiones periódicas con un especialista, puedes empezar a poner en práctica una serie de hábitos para cuidar tus ojos:

    1. Tener una alimentación sana y equilibrada. Comer frutas y verduras, especialmente verduras amarillas y de hojas verdes. Otro alimento con grandes beneficios para los ojos es el pescado rico en ácidos grasos omega-3, como el salmón y el atún.

 

    1. Mantener los ojos hidratados con productos que contengan ácido hialurónico. Parpadear a menudo cuando se trabaja delante del ordenador, ventilar la estancia, beber mucha agua, usar humidificadores y en caso de sufrir sequedad ocular, utilizar soluciones individuales de lágrima artificial.

 

    1. Iluminación correcta. Para no perjudicar la vista, es fundamental tener luz suficiente ya sea en el trabajo o realizando cualquier esfuerzo visual, además se recomienda hacer pausas para que la vista descanse y así prevenir la fatiga ocular.

 

    1. Cuidar la higiene de las lentillas. Mantener las lentes de contacto en un estuche limpio y libre de bacterias, siguiendo una correcta limpieza diaria.

 

    1. Acudir periódicamente a revisiones con el oftalmólogo: Enfermedades como el glaucoma, la retinopatía, y “el ojo vago”, no dan síntomas al inicio, por ello es importante detectarlas a tiempo para mejorar el pronóstico y evitar que se vuelven crónicas.

 

    1. Aprender a relajar la vista. Se puede rebajar la tensión ocular haciendo leves presiones alrededor de los ojos. También la práctica de ejercicios de cambio de enfoque o de relajación muscular permiten aliviar la fatiga visual.

 

La sequedad ocular es una afección crónica, conviene mantener unas medidas higiénico-dietéticas adecuadas para aliviar sus síntomas. En tu farmacia de confianza valorarán tu situación y te ofrecerán los productos que mejor se adapten a tus necesidades.

Tytheoptic, comprometidos con tu salud ocular.

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